Señores... a partir de hoy vamos a abandonar el look trendy de la mediocridad, a dejar asuntos en stock, y a contar unas horillas menos y unas orillas mas. Hoy empieza el camino de verdad, preparen sus bolsillos caballeros porque pretendo dejarselos vacíos, eso sí, nunca olvidarán este viaje.
A partir de hoy, nuestro ego extenderá cheques que luego no podrá pagar, siempre con un golpecito dado. Nuestra mejor manera de comprometernos... darnos a la fuga.
Hoy empezamos "caballeros", y para comenzar voy a presentarles a los conscientes incautos que se unieron a esta apasionante aventura:
El Gran Frías Ambrona, un tipo extraño donde los haya, no hace honor a su primer apellido, es caliente como sus tres compañeros de viaje, pero sí al segundo, come como una bestia, y si lo que come no es sano.... mejorrrr. Nadie sabe donde mete todo lo que come, pero SE LO COME TODO. Un seguro de vida. Será el primero en probar las comidas de los puestos callejeros de Bangkok. Que sobreviva no será garantía para sus compañeros, pero aun así le veremos disfrutar como una hiena mientras prueba un curry rojo extrapicante hyper hot, receta originaria del delta del Mekong causante de que todos los orientales parezca que están extriñidos. El Gran Frias Ambrona, ese hombre que solo cree en la rasurada democracia de la noche, capaz de convencer a un ratón de que un gato negro trae buena suerte, adicto a las metáforas nocturnas, un poeta de la noche. Y por encima de todo, Asturiano, borracho y dinamitero. Eso sí nunca le den un microfono en una boda.
Giorgio... no tengo palabras para él. La única persona que conozco que no reivindica su derecho a la pereza, capaz de atender a sus mascotas naranjas por la mañana, blaquearlas con amoniaco, irse a comer a Gijón, leer La voz de Asturias con el postre, y para con este aún en la garganta acercarse al Pirineo Francés a hacerse unas bajaditas. Les aseguro que a pesar de todo, y a eso de las once de la noche estará de nuevo en Santander para cerrar un after, una churreria y aparecerá para comer de nuevo en Gijon, cortar el cesped, y plantarse en Palencia a hacer "californias" como un descosido, tiene el don de la ubicuidad, es omnipresente y no es Dios... es Giorgio. En fin, incansable aunque se hace mayor. Sabe que el sexo solo es sucio, como él, cuando se hace bien. El roce le enciende como a una cerilla, y eso nos gusta; sabe que la reincidencia rompe el encanto y no le importa, reincide, y eso nos gusta; no bebe por lo bien que sabe, y eso nos gusta; hoy se siente domesticamente bien y hace tiempo que no se da ningún tiro en el pie... y eso nos gusta. Asturiano también, no he visto ni un gremling con mas pelotas que estos dos asturianos juntos.... y eso nos gusta.
Tominight. El primero de mis amigos que se planteó lo inquietante de que las alianzas se coloquen en un dedo llamado anular. No necesita entrar en los sueños de alguien cada día, le bastan dos días a la semana. Enemigo del cálculo y la norma. Hace cosas inutiles pero brillantes, sabe que la palabra conoce caminos que la compostura desconoce, y por eso usa las palabras, y prefiere desconocer la compostura. No es un seductor, es un seductor nato, un hombre diseñado a golpe de coartada que regala risas a fondo perdido. Le encanta el batido de fresa, desgastar ciudades, los extintores y muchas cosas mas prohibidas en algunos paises. Es lo suficientemente listo como para deprimirse y acto seguido, jodido y radiante, decirle a una mujer que es linda desde el pie hasta el alma, y adjudicarse, por esa noche, su racion de protagonista en los sueños de alguien nomás. Odia a los hijos de puta y también les ama, es uno de ellos... es uno de los nuestros. Él es el Gallego... ¿cuánto dura la sorpresa y cuánto dura el regalo? Sólo él lo sabe.
Y yo, el lustroso y celoso mercader del templo, solo conozco el precio que hay que pagar por ser genial y se que nosotros ya lo hemos pagado. Llevo en el bolsillo todo lo que andas buscando, y también esas cuchillitas de hacer cicatrices, para que nunca olvidemos este viaje al otro lado de el mundo, que si todo va como planeamos, empezará el próximo 30 de junio.
Kafka a mi lado, un simple cronista. Nenes, el viaje ha comenzado.
